El té helado de rooibos es una bebida maravillosa que se origina en Sudáfrica. Hecho a partir de las hojas de la planta de rooibos, este té de hierbas es naturalmente libre de cafeína, lo que lo convierte en una opción perfecta para cualquier momento del día. Su sabor rico y terroso se complementa con la dulzura de miel o jarabe de agave, y la adición de limón y menta proporciona un giro refrescante que es perfecto para los cálidos días de verano.
La historia del té de rooibos data de los pueblos indígenas Khoisan de Sudáfrica, quienes han disfrutado de esta bebida durante siglos. No es solo una bebida llena de sabor; el rooibos también está cargado de antioxidantes y tiene numerosos beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la salud del corazón y la reducción de la inflamación.
Esta receta es increíblemente fácil de preparar. Simplemente prepara el té, enfríalo y sírvelo con hielo. Puedes personalizar tu té helado de rooibos experimentando con diferentes frutas o hierbas, convirtiéndolo en una bebida versátil y agradable para todos. Ya sea que estés organizando una reunión de verano o simplemente relajándote en casa, el té helado de rooibos seguramente impresionará a tus invitados y te mantendrá fresco!