La Tarta de Kilmarnock es una tradicional tarta salada escocesa que presenta un tierno hombro de cordero impregnado de los ricos sabores de la cerveza y hierbas frescas. A diferencia de las típicas tartas de carne británicas, la Tarta de Kilmarnock combina de manera única la rusticidad sustanciosa del cordero con la reconfortante y envolvente masa quebrada mantequillosa, reflejando las robustas tradiciones culinarias de Escocia. Generalmente se disfruta durante las temporadas más frías, siendo una celebración de los ingredientes pastoriles prominentes en la región de Ayrshire.
Utiliza una buena calidad de cerveza que disfrutes beber, ya que sus sabores realmente elevan el estofado. Dorar bien el cordero es crucial para profundizar el perfil de sabor, y tomarte tu tiempo para cocer a fuego lento asegura un relleno húmedo y tierno. Para una corteza más dorada, pintar la masa con yema de huevo le da un hermoso brillo.
Nombrada en honor a la ciudad de Kilmarnock en el suroeste de Escocia, la tarta es un plato humilde pero icónico de la zona, respaldado históricamente por las tradiciones de elaboración de cerveza de las cervecerías locales destacadas. Es un plato que evoca la hospitalidad escocesa y la cocina casera.
Disfrutar de la Tarta de Kilmarnock es como saborear un pedazo del alma de Escocia, reconfortándote a través de sus ingredientes sustanciosos y su corteza hecha a mano con cariño.